Beneficios de la música en enfermos de alzhéimer

La música es una parte muy importante de la vida cotidiana, pues la oimos en el coche, en una tienda, en un centro comercial,… La música nos evoca situaciones que pasamos y nos despierta sentimientos. Pero también sirve como tratamiento no farmacológico.

La musicoterapia es una de las más utilizadas para el tratamiento de personas con demencia; está definida como: “El uso de la música y/o de sus elementos musicales (Sonido, ritmo, melodía, armonía) por un musicoterapeuta con un paciente o un grupo, en el proceso diseñado para facilitar y promover la comunicación, aprendizaje, movilización, expresión, organización, u otros objetivos terapeúticos relevantes, con el fin de lograr cambios y satisfacer necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas”.

Como hemos comentado la música es una herramienta para evocar situaciones vividas en el pasado. Muchas veces llegamos a pensar que esos momentos han sido olvidados por el enfermo, pero no es así, porque la música puede hacer que vuelvan a la memoria. Además el estar en contacto con la música puede proporcionar al enfermo mucha calidad de vida en el aspecto emocional, porque si les gusta los calma o los activa, les proporciona bienestar y sentimientos positivos en la relación con los demás. Muchos enfermos incluso cuando van perdiendo la capacidad del habla son capaces de cantar una canción entera y sin confundirse.

Nosotros en casa también podemos practicar algo de musicoterapia, pero en un aspecto básico, lo único que tenemos que hacer es ponerle al enfermo una canción que le guste y cantarla con él o bailar un poco.

Se sabe que las habilidades musicales se suelen conservar en las personas con deterioro cognitivo, incluso cuando los niveles de deterioro son muy altos en la memoria y en el lenguaje. Este hecho lo aprovechan los musicoterapeutas para obtener la máxima motivación y activación posible para estas personas, a la vez que les dá equilibrio, porque la música se puede convertir en un soporte o estructura importante para la expresión y comunicación de sus sentimientos en la vida diaria, a la vez que se frena el deterioro del lenguaje y la memoria.

Otra habilidad que tiene la música es que disminuye las alteraciones emocionales y de conductas negativas, que se producen en las fases más avanzadas de la enfermedad.

Por último, pero no por eso menos importante, la música sirve para paliar el sentimiento de soledad de algunas personas con alzheímer. Pero tengamos en cuenta que la soledad se puede producir incluso si el enfermo está siempre rodeado de su familia, porque sienten soledad al ver que no pueden hacer las mismas cosas que antes o cuando se sienten inseguras al hacer las cosas.

Así que cuando le ponemos música a un enfermo de alzheímer lo que hacemos es recordarle un pedacito de su identidad, que la mayoría de las veces tiene perdida en el fondo de su memoria.