Cuando tenemos por delante todos estos días navideños y tenemos un ser querido dependiente de nosotros, nos planteamos cómo actuar de la forma más adecuada con ellos y que a la vez disfruten de esta época. Buscando en internet información de consejos he dado con un post que difícilmente es superable. Pertenece a un blog llamado: “Mi rincón de apoyo al cuidador” (http://www.mirincondeapoyoalcuidador.blogspot.com.es/), que os recomendamos a todos y os animamos a seguir. Aquí os dejamos el post: Cuidando en Navidad En la mayoría de los casos, la navidad supone un momento de alegría, de disfrute y de reunión con la familia… se cantan villancicos, se celebran fiestas, se reparten regalos, se come y se bebe más de la cuenta… en definitiva, es una época del año en la que, sea como sea la celebración, se rompe con la rutina establecida en el día a día…. Estos cambios de rutina , no solo os afectarán a vosotros/as como cuidadores sino también a los familiares a los que cuidáis, sobre todo si sufren alguna enfermedad neurológica ( Demencias, esclerosis múltiple, Parkinson…) En este tipo de dolencias, dependiendo de la fase o estado en el que se encuentren, son habituales los siguientes síntomas cognitivos :
- Desorientación.
- Alteraciones del estado de ánimo.
- Reacciones agresivas.
- Inquietud y vagabundeo.
- Delirios y/o alucinaciones.
- Trastornos del sueño y alimentarios…
Será muy importante, seguir una serie de pautas de actuación, para que no empeoren o aumenten estos síntomas y, su estado no se vea afectado ni alterado por todas las situaciones estresantes que puedan ir surgiendo en estas fiestas. PAUTAS
- Lo principal será intentar seguir con la rutinasestablecidas en su vida diaria. Aunque para nosotros conlleve un poco más de esfuerzo debemos intentar no variar demasiado sus actividades, ni los horarios en los que las realiza. Respetar horas de sueño, comidas, salidas, ejercicios…
- En la medida en que sea posible, vamos a intentar explicar a nuestros familiares los cambios que se van a producir esos días….anticipar los acontecimientos facilitará la adaptación y evitará situaciones estresantes que se puedan producir por el factor sorpresa. Es decir, si vamos a tener invitados por ejemplo, será mejor que durante el día se lo vayamos contando para que, en el momento que lleguen, no se vean abrumados por ver a tanta gente.
- Durante las navidades, todos los hogares se suelen llenar de decoración navideña… las luces, los adornos … pueden provocar desorientación e incluso alucinaciones visuales por lo que, intentaremos, no sobrecargar en exceso la casa, utilizar colores poco llamativos, evitar las luces intermitentes…
- El exceso de ruido puede propiciar la aparición de ansiedad y dificultar la comunicación … si sois de los que os gusta amenizar las fiestas con villancicos y canciones navideñas, intentad hacer una selección de los más tranquilos y mantenerlos a sonido ambiente, evitando subidas bruscas de volumen…. si os vais a juntar mucha gente en casa, tened las mismas precauciones a la hora de entablar conversación…. procurad no gritar ni tener discusiones acaloradas…
- Es necesario asegurar que existe un único foco de atención en la habitación en la que se encuentre la persona enferma… es decir, si para él/ella ya es bastante distracción ver a la familia, no tendrá mucho sentido que además, estén la tele encendida, la música, las luces del árbol…. esto,les ayudará a centrarse en una sola cosa y no se verán agobiados o con ansiedad al no poder atender a todo.
- Si para llevar a cabo la celebración tenéis que hacer variaciones en el mobiliario, será necesario adaptar estas variaciones a la persona enferma… si a menudo deambula por la casa, deberemos dejarle su espacio para que en cualquier momento pueda hacerlo, sin entorpecer su camino… cualquier cambio que se produzca y que altere su rutina, deberá serle comunicado o se delegará en una persona, la función de acompañarlo por la casa cuando, por ejemplo necesite ir al servicio. Podéis utilizar tarjetas para marcar cualquier cosa o lugar que necesite recordar por si en algún momento se le olvida.
- Debemos mantener o incluso reforzar las medidas de seguridad y/o prevención que a diario utilicemos… con el ajetreo de gente y de tareas para hacer, puede pasársenos algún detalle como cerrar con llave las puertas, dejar iluminados los pasillos o las habitaciones que la persona enferma pueda utilizar, descuidarnos con objetos peligrosos que pueda coger etc…. no nos agobiemos pero tampoco le quitemos importancia…yo recomendaría asignar esa función a otro familiar y así, podréis centraros en otras tareas más tranquilamente y evitar el estar pendiente de todo.
- En relación a la comida y la bebida deberemos mantener en la medida de lo posible sus hábitos diarios… Es importante que, aunque tengamos que variar un poco el menú y sobre todo la forma de cocinarlo, mantengamos intacta las cantidades para no sobrepasarnos y provocar malestar. Lo mismo pasa con la bebida…si no consume alcohol o bebidas gaseosas y/o por medicación lo tiene prohibido… la fiesta no deberá ser excusa para cambiar estas normas. Será recomendable que a la hora de poner la mesa, utilicemos para él/ella los cubiertos que utiliza habitualmente, y que el resto de la decoración sea lo menos llamativa posible, si puede ser de un color. Debemos respetar sus tiempos a la hora de comer y no meterle prisa ni agobiarlo para que termine. Intentaremos hablar de uno a uno respetando los tiempos sobre todo al dirigirnos a él/ella.
- Respetaremos sus pautas de sueño…. si la persona a la que cuidamos acostumbra a dormir la siesta o acostarse a una hora prudente, no variemos esta circunstancia aunque esto le lleve a perderse el momento de las uvas de fin de año… puede que por un día, no pase nada pero, si pierde esa rutina, después nos costará mucho más recuperarla y alterará la vida diaria que teníamos establecida.
- Si nuestro familiar se encuentra desorientado, agitado, inseguro… no dudemos en llevarlo a otra habitación que le resulte familiar por unos minutos, para que vuelva a sentirse seguro y tranquilo… son muchos estímulos para él/ella en un solo día, y no podremos evitar que en algún momento puedan aparecer alguno de esos síntomas. Os aconsejo que, mantengáis su habitación sin ningún cambio ni adorno para que le pueda servir de “refugio” y le ayude a recordar.
- Deberemos escoger la hora de la celebración que mejor se adapte a la situación de la persona enferma para no interrumpir ni afectar de manera negativa su realidad… el número de personas invitadas también deberá adaptarse y ser lo más reducido posible para evitar alteraciones.
- Recomiendo en estas situaciones evitar los desplazamientos largos y las celebraciones en otros lugares menos familiares . Estas circunstancias pueden acarrear problemas más graves de desorientación y agitación. Si no nos queda más remedio, intentaremos llevar a cabo todos estos consejos en el sitio elegido de celebración y deberemos estar mucho más pendientes de ellos y de su estado de ánimo.
- En definitiva, podemos resumir todos estos consejos en una frase “Menos es más”…. es decir, todo lo que se salga de lo normal, habitual…. deberá ser administrado en pequeñas dosis para no alterar de manera negativa el estado de las personas a las que cuidamos….
Estas son solo pautas generales de actuación….. cada enfermedad, cada enfermo, cada cuidador, cada familia es un mundo, por lo que, tendréis que ser vosotros los que las llevéis cabo y las adaptéis, de la mejor manera posible a vuestra realidad… CONSEJOS PARA EL CUIDADOR
- Planificar y organizar. deberemos planificar con tiempo todas aquellas actividades que se salgan de lo habitual y que vayan a suponer cambios. Las celebraciones navideñas nos aportarán muchas más tareas de las que normalmente estamos acostumbrados a realizar, por lo que, debemos ser precavidos y estar preparados para cualquier contrapié. No solo tenemos que pensar en nosotros y en nuestro disfrute, sino en la persona a la que cuidamos y sus necesidades. Yo os recomiendo que cojáis papel y boli y vayáis anotando todos los planes que la navidad conlleva…. es decir, donde pasaréis las fiestas, cual os toca organizar, quién va a acudir, menú, compras, regalos… y, de cada una de las cosas que anotéis, apuntad también que tareas específicas tendréis que llevar a cabo … esto os ayudará a planificar todo lo que tenéis que hacer y organizarlo en consecuencia.
- Ser realistas. Lo que debemos de tener claro es, como decía en otro post, que no somos superhéroes y que la situación que estamos viviendo, va a condicionar el modo de celebrar las navidades…. seguramente sea muy diferente a lo que veníamos haciendo antes, pero no por ello tiene que ser peor… a lo mejor, ya no podemos invitar a tanta gente, hacer tanto ruido o cantar como en otros años, pero eso no debe significar que pierdan su encanto. También tenemos que tener claro donde están nuestros límites y, si vemos que con el tiempo y el esfuerzo que conlleva tener que cuidar a una persona tenemos suficiente, no debemos meternos en más y dejar la celebración para la familia más cercana o hacerlo de manera más íntima.
- PEDIR AYUDA. (Lo pongo con mayúsculas para ver si me hacéis más caso…) Aprovechad que algunos familiares estarán de vacaciones y la llegada de otros que no están a diario, para repartir todas aquellas tareas extra que la navidad os suponga y no os sobrecarguéis de manera innecesaria… Como ya tendréis anotadas todas las cosas que debéis hacer, os será más fácil delegar y organizar quién os va a ayudar y en que funciones. Convertíos en “directores de orquesta” y en supervisores, para poder seguir centrados en la labor de cuidar, que en definitiva, es lo más importante.
- No anticipar ni agobiarse. No os preocupéis ni penséis antes de tiempo que todo va a salir mal, que vuestro familiar no va a estar cómodo, que van a surgir muchos problemas, que no vais a dar echo todo… dejad que las cosas vayan fluyendo y aprended a adaptaros a ellas …os sorprenderá saber que, muchas de las ideas negativas que tenemos, nunca llegan a suceder y esto provoca sufrimientos antes de tiempo y sin motivo. Si nos preocupa por ejemplo, que venga mucha gente a casa y pueda alterar el estado de nuestro familiar…pensemos de otra manera y tomémoslo como una oportunidad de que se vean después de mucho tiempo, de que recuerden momentos vividos, de la alegría que le supondrá ver gente nueva en casa, nietos, sobrinos, bisnietos, primos…. apliquemos una actitud positiva en todo lo que pensemos que puede ocurrir….
- Ejercicio físico y emocional. La navidad y todo lo que conlleva es, un momento ideal para ejercitar tanto mental como físicamente a la persona que cuidamos y, la aparición en escena de otros familiares son el complemento y la excusa perfecta para hacerlo. Siempre que sea posible, y dependiendo del tipo de enfermedad, aprovechad estas fiestas, para hacer cosas nuevas juntos, que te ayude en la cocina con tareas sencillas, ver como se va preparando la comida, decorar la casa, salir a pasear para ver el alumbrado, poner la mesa, contarle quiénes son los invitados y que recuerde su parentesco o nombres, ver álbumes de fotos , cantad canciones que le gusten y de las que se acuerde, ver programas navideños en la tele y reconocer personajes…. con todos estos ejercicios y actividades potenciaremos no solo a nivel cognitivo y físico, sino que será la excusa perfecta, para pasar un buen rato entre familia y un “chute” de energía para el resto del año….
- Cuidarse y Descansar. El estar muy ocupados no es excusa para descuidaros, por lo que será muy importante que reservéis un tiempo para vosotros….descansad, desconectad, id a la peluquería, maquillaros, comprad un traje nuevo, quedad con amigos, divertiros en pareja… cualquier ocupación que tenga que ver solo con vosotros y vuestro bienestar os ayudará a despejar la mente y a salir fortalecidos de estas fechas.
- Ser positivos y Disfrutar. A mucha gente no le gusta la navidad… estas fechas les traen malos recuerdos, se acuerdan de cuando su familiar no estaba enfermo, evocan momentos pasados en los que todos eran felices, piensan que por el mal estado del familiar ya no merece la pena celebrarla porque no las va a disfrutar… lo comprendo y lo respeto al máximo pero, como siempre os digo, intentemos ser positivos y vivir el presente… el pasado no va a volver y el futuro es incierto asique, no nos queda otra que vivir, y que mejor que con una sonrisa ¡¡¡¡ Os puedo asegurar que por muy dura que sea la enfermedad o la situación de la persona enferma, nunca dirán que no a un gesto de cariño, a una carcajada, a la música, al ruido de los niños, a un abrazo, una felicitación…. puede parecer que no lo disfruta o que no nos reconoce ni atiende a nuestras preguntas, pero no es así….lo harán a su manera…. En muchos casos, por desgracia, quizá no tengamos otra oportunidad para celebrar la navidad junto a ellos, por lo que…. Qué mejor razón para hacerlo ahora¡¡¡¡