LAS VENTAJAS DE LA PRIMAVERA EN LA TERCERA EDAD

Las estaciones del calendario se suceden de forma cíclica a lo largo del tiempo.  Prueba de que hemos cambiado de estación, dejando atrás el invierno y dando paso a la primavera, son los colores que tienen los jardines de nuestra residencia de mayores Mirasol.

Las personas de la tercera edad sufren mucho durante el invierno como consecuencia del efecto de las bajas temperaturas ya que el frío también influye en el tiempo de ocio y en la rutina diaria de los mayores.  Por esta razón el sol se convierte en una fuente de vida que aporta energía y alegría y entusiasmo a cualquier edad con la llegada de la primavera.

El tiempo influye más de lo que creemos en el estado anímico.  Por ejemplo, los mayores deben protegerse mucho de las altas temperaturas en verano.  Por ello, la primavera se convierte en una de las temporadas más bonitas para disfrutar de la naturaleza.

De hecho, mantener la actividad y disfrutar de la vida social es fundamental durante la tercera edad, ya que a veces los ancianos se sienten solos y poco integrados en la sociedad.

Nuestros residentes ya empiezan a llenar los jardines donde se reúnen con los familiares.  Hay niños revoloteando por todos los lados y eso es una gran alegría.

También empezamos a trabajar en terapia ocupacional en el exterior, disfrutando a la vez de nuestros jardines y de las actividades.  Esto les encanta a nuestros residentes, además de irles de maravilla.